BORROMINI Y BERNINI: ETERNOS RIVALES es la historia de una revolución arquitectónica realizada por un genio solitario que cambió para siempre el aspecto de Roma, al asumir un reto personal contra las convenciones y los prejuicios y tener la humildad de aprender del pasado para inventar el futuro, y el valor de perseguir una idea pagando un alto precio hasta el final de sus días. El estilo de Borromini es reconocible, excéntrico, diferente: se distingue del de sus contemporáneos y destila una austera autoridad espiritual, con incesantes alusiones que evocan el infinito. Pero ésta es también la historia de la rivalidad entre dos de los artistas más famosos de todos los tiempos, la rivalidad entre Borromini (1599-1667) y Bernini (1598-1680). Es sobre todo la historia de la rivalidad entre Borromini y él mismo: era un genio tan apegado a su arte que lo convirtió en un demonio, un demonio que lo devoraba por dentro, hasta que se vio empujado a elegir la muerte, haciendo un gesto dramático para ganar la eternidad.