Desde la llegada de los conquistadores españoles, la tribu Waorani de Ecuador ha defendido su selva amazónica con lanzas. En los años 50, los misioneros americanos abrieron el camino para que las compañías petroleras entrasen en sus tierras. Ahora, el 68% de la Amazonia ecuatoriana, hogar de unas 12 tribus, ha sido dividida en plataformas petroleras, contaminado así una de las selvas con mayor biodiversidad del planeta. Solo una pequeña tribu, los Waorani, ha luchado exitosamente para mantener el petróleo alejado de la mayor parte de su tierra.